Ruta running por la hoces del Ebro, entre Orbaneja del Castillo (Burgos) y Villaescusa de Ebro (Cantabria)




Espectacular ruta running de 16 km. por la hoces del Ebro y alrededores entre las provincias de Burgos y Cantabria. Desde Orbaneja del Castillo a Villaescusa de Ebro, recorriendo páramos, cañones por caminos y senderos en plena naturaleza.


Sábado 4 de julio de 2015

Hacemos noche en un alojamiento rural de Orbaneja del Castillo. Nada más llegar a este pueblecillo sorprende como siendo tan pequeño, perdido en medio de la nada, puede tener tanto atractivo natural.
El pueblo se encuentra inmerso en un cañón rodeado por un circo de roca caliza que corona un crestón de formas, cuanto menos, curiosas. Pero eso no es todo, hay una corriente de agua, con todo tipo de saltos, cascadas, piscinas naturales de agua cristalina,  que literalmente atraviesa el pueblo desde la cima hasta llegar al río Ebro.







Pero bueno, vamos a hablar de la ruta del día siguiente:

El recorrido:

La ruta es circular, algo más de 16 km. con algún desnivel importante sobre todo en la salida y llegada al pueblo.  La primera parte camino/pista forestal. Después, casi campo a través hasta llegar al Villaescusa del Ebro y la última parte una preciosa senda siguiendo el curso del Ebro, la GR99.





La ruta en wikiloc --> aqui

Primer tramo km. 0 al 4,5 km. Orbaneja del Castillo – Cantabria.


Desde la casa rural salimos del pueblo subiendo por un camino señalizado. Es una fuerte subida, que hacemos andando. Nos va ofreciendo una bonita estampa del pueblo encajado en el cañón.









Cuando llegamos arriba, a una especie de meseta, el camino sigue en llano atravesando el páramo,  ¡A correr!.

Enseguida llegamos a una zona poblada con cabañas circulares construidas únicamente de piedra, los “chozos”, utilizadas en otros tiempos por pastores o agricultores.







Poco después la vegetación va cambiando entrando en una zona de quejigo o carrasca, a veces bastante espesa.

Sobre el Km 3 encontramos una señal que nos indica que el camino hacia Villaescusa de Ebro es el de la izquierda.





Continuamos por el camino entre quejigos hasta poco antes del km. 5, que coincide más o menos con la invisible frontera entre la provincia de Burgos y Cantabria. Aquí el camino se bifurca de nuevo. Por la izquierda está la señal blanca y roja paralela de senda, mientras que por la derecha están las dos líneas cruzadas.





Está claro que la ruta “oficial” sigue por el camino de la izquierda, pero como vamos siguiendo los tracks de una ruta descargada de wikiloc, seguimos por la derecha, que es por donde nos indica el GPS.

Segundo tramo km 4,5 – 9. A Villaescusa de Ebro por el monte.


Este segundo tramo fue el más dificultoso. Teníamos claro que al ir siguiendo la ruta del GPS perdernos no nos íbamos a perder, pero a veces el camino desaparecía del suelo y había que ir prácticamente monte a través, siendo este tramo donde más tiempo “perdimos” ya que la mayor parte la tuvimos que hacer andando, saltando piedras, …







La primera dificultad (además de cruzar alguna alambrada) fue bajar por el Barranco de Montecoza hasta el valle, a veces sin senda, entre las piedras, aunque la vista era espectacular.
Una vez abajo, pudimos localizar la senda que seguía un arroyo hasta desembocar en campo abierto, de labranza, donde al fondo se intuía algún pueblecillo y una carretera.





Seguir la senda hasta la carretera y luego coger la carretera hubiera sido lo fácil, pero como íbamos siguiendo los “tracks”, estos preferían que siguiéramos campo a través. Es lo que tienen estas cosas de la tecnología que si el que ha subido los tracks se ha equivocado de camino, tú vas detrás…

Así que en vez de seguir por lo fácil, seguimos la ruta marcada por el GPS y tuvimos que cruzar un cultivo, unos matorrales, una alambrada, en fin, para seguir después por la ladera del monte, desde donde veíamos abajo la carretera, hasta llegar al puente de Villaescusa de Ebro, con más pena que gloria. Eso sí, mi mujer dice que vio un ciervo, yo bastante tenía con mirar el GPS ya iba servido.









Tercer tramo km 9 al 16,5. De Villaescusa de Ebro a Orbaneja del Castillo por el GR99


Cruzamos el puente sobre el Ebro y allí estaba Villaescusa. Ya no hacía falta GPS. Desde el mismo puente hay indicaciones para seguir el camino de Gran Recorrido GR99 que va siguiendo el curso del Ebro.






La senda va acompañando al Ebro por la margen derecha, por la izquierda va la carretera,
Durante el primer kilómetro el camino es ancho, transitable por vehículos, algún pescador que se acerca por allí, hasta la central Eléctrica de Tobazo. En el deshielo se puede subir por esta zona y ver una bonita cascada, pero ahora no es la época.




A partir de aquí, el camino se convierte en una preciosa senda alfombrada de hojas entre una espesa arboleda. Sólo de vez en cuando hay algún claro que nos permite ver el horizonte rocoso.






La vegetación a lo largo de todo el recorrido es abundante, encontramos diferentes especies de árboles. Algunos ejemplares de hayas enormes, robles, avellanos, helechos,…














El runrún del río es constante, zonas de calma y zonas de agitación y, de vez en cuando, entre la arboleda hay algún claro que permite apreciar las paredes del cañón por el baja el rio.





Tras unos cuantos kilómetros de correr acompañando el rio en su sinuoso recorrido, llegamos a la última parte donde ya se aprecian las formas caprichosas de la pared rocosa enfrente de Orbaneja del Castillo.






Dejamos la GR99 y cruzamos el puente para subir atravesando de nuevo el pueblo y llegar al punto de inicio en el pueblo. El hospedaje donde, contemplando semejante estampa, daremos cuenta del merecido desayuno que nos espera.

Lástima no poder quedarnos un día más para descansar en este tranquilo pueblo y continuar al día siguiente por la GR99 hacia Escala, Pesquera de Ebro,… habrá que dejarlo para otra ocasión.




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